Dolor permanente de hombro que incrementa por actividad campesina ¿Qué hago?

El dolor de hombro nocturno es un indicador de lesiones del hombro como tendinitis, bursitis, tendinosis, pinzamiento, desgarros del manguito rotador y capsulitis. Si el brazo dolorido no se mueve tan fluida y completamente como el hombro que no duele, puede tratarse de un hombro congelado. Todas estas patologías causan cierto nivel de rigidez e inflamación del hombro y más aún si algunas de estas se trata de una lesión cronificada.

Independientemente de la patología, una de las recomendaciones terapéuticas que enfatizo es el estiramiento de la articulación del hombro (articulación glenohumeral). En mi experiencia, una vez que se optimiza la flexibilidad o el rango de movimiento del hombro a traves de ejercicios, el dolor mejora. 

Hacer ejercicio unas horas antes de acostarse también puede ser útil para minimizar el dolor al dormir y mientras realiza las actividades cotidianas; los estiramientos pueden ayudarlo a reducir la tensión y el estrés acumulados durante el día, lo que le ayudará a reparar las estructuras lesionadas que le esté causando dolor. Si el dolor persiste, siempre puede intentar envolver su brazo, colocarlo sobre una almohada (dormir sobre el hombro no dolorido) o usar un cabestrillo para ayudar a prevenir el movimiento durante el sueño.

En los casos en que el dolor es causado por una inflamación, como en la tendinitis o bursitis, el dolor nocturno puede desaparecer de forma permanente con estas recomendaciones. 

Siempre es mejor consultar a un profesional antes de comenzar cualquier tipo de tratamiento para el dolor de hombro crónico. Un diagnóstico adecuado siempre es fundamental para un abordaje terapéutico exitoso, por lo que es posible que necesite un examen y otras pruebas complementarias como una resonancia magnética o una radiografía de hombro.