La principal diferencia entre las sillas ergonómicas y las sillas normales es la orientación del asiento.
En la silla clásica la zona de apoyo de las nalgas es horizontal, paralelo al suelo generando que la articulación de la cadera se coloque a 90 grados, esto va a hacer que se borre la curva lumbar y la posición sea de derrumbe, una posición que precisa menos activación muscular.
En la silla ergonómica (1) la posición del asiento tiene una inclinación anterior haciendo que la articulación de las caderas forma un ángulo obtuso, mayor de 90 grados, así vamos a conseguir que se genere la curva lordótica y la posición sea más activa.
¿Qué postura genera la silla ergonómica?
La silla ergonómica genera una posición de descanso activo, es decir, es una postura estática, pero los músculos están trabajando, no se borran las curvas naturales de la espalda. La musculatura está activada. Esto se produce principalmente por la angulación de la articulación coxofemoral (2), la apertura de las caderas mayor de 90 grados va a conllevar anteversión pélvica que a su vez va a activar la lordosis lumbar en lugar de borrar las curvas.
Referencias Bibliográficas
(1)https://sci-hub.se/10.1016/j.apergo.2018.03.016
(2)https://sci-hub.se/10.1016/j.bjpt.2017.09.003