Uno de los motivos de consulta podológicas más habituales en verano es debido a la aparición de unas lesiones bien circunscritas y delimitadas en la planta del pie producidas por el virus del VPH ( Virus Papiloma Humano), y que se conocen con el nombre de verrugas plantares o papilomas.
En este artículo hablaremos un poco de ellas, y daremos una serie de medidas preventivas para evitar la infección.
Indidencia de las verrugas plantares
Este tipo de lesiones que aparecen sobre todo en adolescentes y adultos jóvenes, alcanzando el pico máximo entre los 12 y 16 años, se debe según múltiples artículos a que el sistema inmune en esas edades esta aún poco desarrollado.
Además es más común que aparezca en mujeres que en hombres, de forma unilateral con un porcentaje del 95%, y en zonas de máxima presión como en los metatarsianos y el talón.
Factores predisponentes para la formación de verrugas
Existen múltiples factores que predisponen a la formación de una verruga plantar, y se dividen en contacto directo si se transmiten de persona a persona o contacto indirecto como es mediante vestuarios, piscinas, duchas…
Algunos de estos factores que favorecen la infección por el VPH son;
- Abrasiones superficiales producidas por rascado, roce, o fricción.
- Traumatismo repetitivo producto de actividades atléticas, alteraciones biomecánicas y calzado inadecuado.
- El calor y la humedad aumentan la sudoración de la piel, originando maceración y mayor facilidad para la penetración del virus.
- Contacto con otro paciente infectado.
- Falta de higiene.
- Contacto con superficies contaminadas como gimnasios, vestuarios, suelos de cuartos de baños o toallas, acompañados de unas condiciones de calor y humedad.
- Personas con sistema inmune débil, bajadas de defensas, o sometidas a mucho estrés.
Prevención de las verrugas plantares
Lo primero que debemos hacer es tener en cuenta una serie de medidas preventivas y llevar a cabo una serie de normas higiénicas.
- Lavar todos los días los pies con agua caliente y jabón o alcohol, ya que esto es suficiente para inactivar el virus.
- Secar el pie afectado con una toalla diferente a la del otro pie, evitando acercar el pie a fuentes de calor como braseros, radiadores…
- No compartir objetos personales como toallas, maquinillas de afeitar, calcetines o zapatos.
- Cuando hay una persona en casa que padece la infección se recomienda limpiar el baño después de cada uso y rociar la bañera con lejía después de cada ducha.
- Evitar el contacto directo de los pies con el suelo, y sobre todo utilizar calzado apropiado en piscinas y baños públicos.
- En el caso de que se padezca hiperhidrosis (exceso de sudoración) tratar adecuadamente el problema con los diferentes tipos de fármacos o fórmulas magistrales que existen en el mercado.
- Usar apósitos impermeables sobre las verrugas plantares cuando se van a emprender actividades colectivas como la natación.
- No quemar ni rasurar las verrugas ya que esto puede hacer que se propague el virus a otras partes del cuerpo y se produzcan reinfecciones.
- Finalmente la medida preventiva más importante es la de acudir al podólogo para hacer un estudio general del pie y mostrar posibles afecciones que presente el paciente, para tratarlas lo antes posible y evitar así posibles complicaciones.
Tratamiento de las verrugas plantares
Las verrugas plantares pueden abordarse desde distintos esquemas terapéuticos, aunque dada la benignidad de este virus se aconseja evitar tratamientos demasiado agresivos.
A continuación nombraré algunos de los tratamientos utilizados por los podólogos para tratar este tipo de lesión.
- El primer tratamiento y el más utilizado es el ácido nítrico, muy toxico y corrosivo y que destruye piel y mucosas. Produce una quemadura de color amarillo.
- Ácido salicílico es otro de los tratamientos que se utilizan, aunque debido a que es un ácido suave su lentitud de actuación es mayor y hace necesario que su empleo sea más prolongado. Es ideal para utilizar en niños, y está contraindicado en embarazadas, pacientes diabéticos o con problemas circulatorios.
- La crioterapia es un método físico que consiste en la destrucción controlada y eficaz del tejido enfermo mediante frio. Es un método seguro y poco agresivo, aunque puede producir cicatrices si no se realiza correctamente.
- Acupuntura, es aquella técnica terapéutica que consiste en clavar agujas en determinados puntos del cuerpo humano. Se utiliza para verrugas cronificadas y de larga evolución. Este método está basado en la dimensión energética denominada CHI por la medicina china.
- El láser es uno de los tratamientos más actuales y que se utilizan cuando fracasan otros. Se usa especialmente en lesiones extensas y requiere anestesia local.
Ya sabéis, a tener en cuenta esos consejitos, y mantener el virus muuuuuy lejos!!