En la actualidad--estadísticamente hablando--es más probable que esté más enfermo que sano. Casi el 70 % de los adultos toman al menos un medicamento prescrito para atender una enfermedad crónica u otro padecimiento médico, donde los principales medicamentos que encabezan la lista son los antibióticos, antidepresivos y analgésicos narcóticos.
Una de cada 5 muertes está vinculada a la obesidad, y la diabetes se ha incrementado en un 300 %, en tan solo 15 años. En total, casi un tercio de la población padece prediabetes, o bien algún tipo de diabetes, que le predispone a toda una serie de graves problemas de salud y enfermedades crónicas.
Además, más de medio millón de personas solo en los Estados Unidos mueren debido a la enfermedad de Alzheimer , cada año; por lo que esta es la tercera causa principal de muerte en los Estados Unidos, después de las enfermedades cardíacas y el cáncer.
Es importante destacar que, TODAS estas enfermedades están científicamente vinculadas a malas opciones de estilo de vida y cambios en la alimentación moderna. Así que, ¿habrá alguna manera de salir de esta evidente trampa para ratones? Creo que sí.
Su cuerpo está diseñado para sanar sin esfuerzo
En resumen, me he dado cuenta de que tener una buena salud no es una cuestión tan complicada como podría pensar, y las estrategias, que a la vez son simples y económicas (o gratuitas), podrían mejorar significativamente su estado de salud.
Contrario a lo que escucha en los anuncios de medicamentos en la televisión, su cuerpo está diseñado--por naturaleza--para sanar y repararse a sí mismo, y para evitar activamente la aparición de enfermedades, a través de sistemas de retroalimentación incorporados. Pero para que su cuerpo funcione correctamente, necesita ser sustentado y alimentado.
La simple verdad es que la mayoría de las enfermedades ocurren por tener una mala nutrición y falta de movimiento físico. Los medicamentos no ayudan ni alimentan las capacidades innatas de sanación de su cuerpo. Por el contrario, los alimentos, dormir la cantidad de horas adecuadas y el movimiento, sí lo hacen.
La alimentación y el estilo de vida podrían beneficiar o dañar su salud
Los tipos de alimentación que contienen niveles elevados de azúcar, cantidades excesivas de proteínas de baja calidad y cantidades insuficientes de grasas saludables, en combinación con la inactividad, promueven una cascada de efectos metabólicos que ocasionan una disfunción mitocondrial, y QUE al parecer se encuentran entre los principales factores causantes de la mayoría de los padecimientos.
Desafortunadamente, a la mayoría de los médicos se les enseña muy poco sobre el uso de los alimentos para sanar, en la escuela de medicina; e incluso, muchos nunca se toman el tiempo para aprender los principios nutricionales más básicos.
Como resultado, muy pocos médicos convencionales tienen un conocimiento previo para orientarle en relación a la sanación alimenticia. Muchos desconfían totalmente en las afirmaciones de que los alimentos podrían sanar. No obstante, en realidad tal desconfianza no se basa en hechos.
Los estudios médicos proporcionan una gran cantidad de evidencias que muestran cómo los alimentos y la actividad física influyen en la salud y longevidad. Inclusive, hay una sólida base de pruebas que demuestra que su mente y perspectiva influyen en su salud, para bien o para mal.
Es fácil olvidar que nuestra alimentación, y estilo de vida han cambiado dramáticamente en los últimos 100 años. Muchos no recuerdan ni comprenden cómo era la vida en ese entonces, y lo que las personas comían realmente, y eso es parte del problema.
Es fácil pensar que las actuales epidemias de salud se deben a algún proceso misterioso, cuya raíz--en gran parte--es desconocida. Simplemente, eso es falso.
Podría decirse que, la respuesta yace en el pasado, porque para poder sanar "sin hacer esfuerzo" y/o evitar una enfermedad por completo, debe reconocer el hecho de que consumir ALIMENTOS REALES (es decir, alimentos que sean tan cercanos a su estado natural, o tan puros, como sea posible) es una necesidad fundamental para tener salud y prevenir enfermedades.
¿Su alimentación es lo que le enferma?
Una de las razones por la que ha aumentado la prevalencia de tantas enfermedades, es porque no consumimos suficiente cantidad de alimentos reales. La mayoría de la población en España consume de forma predominante una alimentación procesada, que prácticamente garantiza que sufrirá problemas de salud en algún momento.
Dos de los principales culpables son el azúcar y las grasas trans. Esto incluye a todos los tipos de azúcar, pero en particular, el azúcar refinado y la fructosa procesada (HFCS, por sus siglas en inglés) seguida muy de cerca por los granos refinados, ya que estos ingredientes hacen que su nivel de insulina llegue a sus máximos niveles.
La insulina permite que sus células utilicen azúcar, pero cuando consume demasiada cantidad de azúcar, eventualmente sus células se hacen resistentes a la insulina. Si sus niveles de insulina en ayunas son superiores a 3 o 4, padece resistencia a la insulina; y a su vez, tener resistencia a la insulina podría ocasionar diabetes y una larga lista de problemas de salud y enfermedades relacionadas.
Cuando tiene resistencia a la insulina, su cuerpo también almacena grasa, en vez de quemarla. Como resultado, se vuelve extremadamente difícil que su cuerpo utilice la grasa corporal almacenada para obtener energía; por lo tanto, usualmente el aumento de peso está relacionado con la resistencia a la insulina.
Las buenas noticias son que podría revertir la resistencia a la insulina de una forma bastante rápida y fácil al consumir alimentos reales y cambiar los carbohidratos netos (carbohidratos totales sin fibra) por grasas saludables.
Al disminuir el contenido de azúcar en su alimentación, y consumir una mayor cantidad de grasas saludables, su cuerpo podría comenzar a hacer la transición de quema de azúcar como principal fuente energía, a quema de grasa, y esto tiene varios beneficios para la salud.
No sólo le ayudará a perder grasa corporal, sino también le ayudará a optimizar su función mitocondrial y disminuirá la inflamación, al permitir que su cuerpo se cure y regenere.
La falta de movimiento y un insuficiente exposición a los rayos del sol produce daño
Su cuerpo también fue diseñado para moverse más o menos continuamente. El hábito de permanecer sentado durante la mayor parte del día es un convenio que no era algo habitual hace 100 años.
De hecho, los estudios demuestran que hacer ejercicio podría ser tan eficaz como un tratamiento que incluya muchos medicamentos, incluyendo antidepresivos y medicamentos para prediabetes y enfermedades cardiacas. En el pasado, estas enfermedades eran bastante inusuales; y la razón de ello, es porque más que nada eran enfermedades inducidas por el estilo de vida.
Actualmente, más de 10.000 estudios muestran que permanecer sentado por mucho tiempo tiene un efecto devastador en su salud.
Esto promueve de forma activa e independiente, docenas de enfermedades crónicas, incluyendo un aumento de peso y diabetes tipo 2, incluso si hace ejercicio varias veces a la semana y tiene una muy buena condición física. La triste verdad, es que no se pueden compensar las ocho y diez horas de inmovilidad, con los 30 o 60 minutos de ejercicio, aun si hace ejercicio todos los días.
Otros componentes de estilo de vida saludable incluyen exponerse prudentemente a los rayos del sol y hacer grounding. Estos son hábitos de estilo de vida que tienen un poderoso potencial para fomentar la salud, los cuales tienen un costo mínimo o no cuestan nada--Sin duda, no se puede decir lo mismo de los medicamentos y tratamientos médicos convencionales--por lo que sería una tontería no hacerlos.
Un buen consejo de bienestar para vivir
Hacer un compromiso para vivir saludablemente es un proceso continuo. Es prácticamente imposible hacer todos los cambios necesarios de una sola vez. El truco es tener un amplio entendimiento de lo que significa "vivir saludablemente", y luego implementar los cambios necesarios uno por uno.
