Los ligamentos articulares son aquellos que se encuentran uniendo las diferentes articulaciones. Todas las articulaciones cuentan con ligamentos, estos serán más o menos numerosos, o robustos en función de las características de la articulación.
Los ligamentos (1) son haces de tejido conectivo que conectan un hueso con otro hueso adyacente. El elemento básico de los ligamentos son las fibras de colágeno.stas fibras son muy fuertes, flexibles y resistentes a los daños causados por las tensiones de tracción o compresión. Las fibras de colágeno se disponen generalmente en haces paralelos, que ayudan a multiplicar la resistencia de las fibras individuales. Los haces de colágeno están unidos al revestimiento exterior que rodea a todos los huesos, el periostio.
Por lo tanto, los ligamentos son estructuras de tejido conjuntivo que unen a las articulaciones permitiendo los movimientos fisiológicos de las mismas y limitando los movimientos anormales o lesivos. Los ligamentos presentan 3 funciones principales y te las contamos a continuación.
Dentro de las funciones de los ligamentos (2), tenemos:
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Estabilizan los extremos articulares.
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Guían el movimiento.
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Facilitan la información propioceptiva enviando información, a través de las terminaciones nerviosas al sistema nervioso central.
Los ligamentos tienen un grado de especialización muy elevado, ya que son tejidos extraordinariamente definidos para cumplir su función.
Los ligamentos (3) están constituidos fundamentalmente por colágeno de tipo 1 (70%) y hay gran cantidad de fibras de elastina, y algunas células de tipo fibroblástico (células alargadas y fusiformes que se disponen siguiendo el eje longitudinal del ligamento).
La mayor parte de los ligamentos son extra articulares. Estos ligamentos mantienen continuidad con otros tejidos que están próximos a ellos, se entremezclan a veces con la cápsula articular, con el tejido sinovial, con el tejido conjuntivo, el tejido adiposo... todas las estructuras que están alrededor de la articulación.
Los ligamentos no tienen un comportamiento elástico, excepto uno: el ligamento amarillo que está situado en la columna vertebral.
Los ligamentos son fácilmente elongables, pero a medida que la tracción aumenta, el ligamento se va convirtiendo cada vez en una estructura más rígida. Esto se produce por la disposición de las fibras de colágeno.
La deformidad en los ligamentos no solo depende de la magnitud de la fuerza que los deforma, sino también del tiempo de aplicación de esa fuerza.
- Edad: a mayor edad, mayor rigidez.
- Velocidad de ejercicio: cuanta más rapidez en el movimiento, la respuesta va a ser de más rigidez.
- La inmovilización prolongada por adherencias sinoviales va a disminuir la elasticidad de los ligamentos por proliferación de tejido fibroadiposo y va a aumentar la rigidez articular. Esta rigidez se puede recuperar con mucho ejercicio y durante periodos de tiempo bastante prolongados. La realización de ejercicio físico de manera programada, va a mejorar la resistencia a la rotura.
Los ligamentos extra articulares están poco vascularizados, pero reciben aportes vasculares tanto de las inserciones como a través de los tejidos circundantes.
Los ligamentos intrarticulares (por ejemplo los cruzados), reciben una vascularización muy pobre.
La rotura de un tejido que tenga pobre vascularización no se va a cicatrizar; sin embargo, si el tejido que se rompe está muy bien vascularizado, la cicatrización se va a producir más fácilmente. Por lo que, la cicatrización de todos los ligamentos no va a ser igual.
Las lesiones ligamentosas más habituales se van a producir por tracción o por torsión, y se acompañan de una desestructuración del tejido de manera notable. Por acción de la tracción se pone en tensión el tejido y se rompe, quedando muy desestructurado. Los extremos se deshilachan de manera irregular y quedan haces deformados, que se han estirado y deformado antes de romperse. Esto es lo que se conoce como esguince o distensión de ligamento.
El proceso de reparación de estos ligamentos es diferente, dependiendo si se trata de ligamentos extra articulares o intra articulares.
Como los ligamentos tienen mucho tejido alrededor en conexión con ellos (tejido conjuntivo, celular adiposo) y adherencias cerca de la cápsula, al romperse por tracción siguen un proceso de cicatrización clásico:
- Fase de inflamación: se forma un hematoma en los extremos del ligamento. Son ligamentos que están en contacto con partes blandas extrarticulares, y se inician procesos de organización del hematoma; proliferan células dentro del hematoma, y se liberan sustancias químicas.
- Fase de proliferación vascular: aparecen fibroblastos y pequeños brotes vasculares. Se va formando una matriz que formará el tejido cicatricial.
- Fase de remodelación y maduración del tejido de cicatriz: se produce una reorientación de los haces de colágeno que se han ido formando en ese hematoma inicial. En esta fase la resistencia del nuevo tejido que se ha formado ya es considerable, suficiente como para que pueda soportar movilización y estímulos mecánicos que van a ayudar a la maduración y a la adecuada función del tejido de cicatriz. Esto ha hecho que se cambie la actitud antes de terminar las lesiones ligamentosas que antes se sometían a una inmovilización durante mucho tiempo.
La cicatriz no contribuye nunca a alargar el ligamento, al contrario, ya que se va a generar una retracción, esto es así porque las nuevas fibras de colágeno tienen una orientación más irregular dentro del ligamento. La única forma de devolver la orientación regular a esas fibras de colágeno, y de devolver la consistencia, es probablemente la realización de ejercicio físico específico para el ligamento que se trate.
Los ligamentos intrarticulares no van a cicatrizar porque no tienen posibilidad de formar un hematoma, al estar dentro de la articulación, no están adheridos a ningún tejido; por tanto, aunque sangre, el hematoma se va a diluir dentro de la articulación y no va a poderse quedar un hematoma alrededor de los cabos deshilachados del ligamento. Aunque, los cabos dislacerados puedan tener reacciones vasculares, nunca se va a producir cicatrización en estos ligamentos intrarticulares.
En caso de que haya una proximidad razonable de los extremos del ligamento roto, por poca que sea la movilidad articular, va a tender a separar estos extremos del ligamento, de tal manera que no va haber forma de mantenerlos en contacto. Además, es muy difícil suturar los dos extremos de un ligamento roto, el tejido residual se “deshilacha” muy fácilmente, por ello es necesario el uso de injertos que ayuden a restaurar el ligamento.
A continuación te nombramos algunos aspectos importantes a recordar de los ligamentos (4):
- Los ligamentos son estructuras fundamentales para la estabilidad de la articulación.
- Los ligamentos no son estructuras que obtengan gran vascularización, por lo que su proceso de recuperación tras una lesión es más tardío.
- Los ligamentos no son estructuras elásticas, por lo que un movimiento de torsión o tracción abrupto generará una lesión del mismo.
- Tras una lesión de ligamentos es imperativo el inicio de un protocolo de tratamiento con un fisioterapeuta para asegurar una recuperación adecuada y se restablezcan correctamente las funciones de los ligam
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