Las fracturas de clavícula presentan el 5% de todas las fracturas vistas en traumatología. Suelen producirse por un traumatismo directo en la zona lateral del hombro (frecuente en deportes como rugby) o por una caída (frecuente en ciclistas, motociclistas y patinadores).
Fractura de clavícula
La fractura de clavícula es muy frecuente. Seguramente hemos escuchado de alguien que le tiene, la tuvimos o alguien conocido la tuvo, por eso, en este vídeo queremos darte toda la información que necesites sobre este tipo de fractura para que sepas cómo es su tratamiento y su pronóstico de recuperación.
Esta fractura ocurre normalmente a nivel de la zona media y en la región acromioclavicular. Es igual de frecuente en niños y adultos, ocurre debido a traumatismos deportivos de moderada o alta energía (ciclismo, motociclismo, equitación, fútbol, básquet) y por caídas en la cara lateral del hombro. Se puede evidenciar solo con un examen radiológico.
Tipos de fracturas de clavícula
Fractura de clavícula grupo I: son las más frecuentes; la zona de fractura es el tercio medio de la clavícula y el tratamiento suele ser conservador.
Fractura de clavícula grupo II: son menos frecuentes y la zona de fractura se produce en el tercio distal de la clavícula, más cerca de la articulación acromio-clavicular (AC). Podemos distinguir tres tipos:
- Fractura Tipo I. Es una fractura estable, no desplazada y que no requiere intervención quirúrgica. La zona de fractura es lateral a los ligamentos coracoclaviculares (CC), quedando éstos intactos.
- Fractura tipo II. Es una fractura desplazada, por lo que suele requerir cirugía. La fractura es medial a los ligamentos CC y aunque no afecta a la articulación en sí hay riesgo de pseudoartrosis.
- Fractura tipo III. Es la más grave de todas. Existe fuerte lesión ligamentosa y afecta a la articulación AC.
Tratamiento conservador
El tiempo de recuperación de una fractura de clavícula rehabilitada de forma conservadora es de unos 90 días. Las fracturas claviculares no requieren ningún tipo de maniobra de reducción manual porque la mayoría son estables, y en aquellas fracturas inestables ningún vendaje podrá reducir una fractura desplazada. Además, el vendaje en “8” puede producir lesiones dérmicas por irritación o lesiones neurodinámicas por compresión del paquete nervioso.
¿Cuándo operamos una fractura de clavícula?
El 90% de las fracturas claviculares responden bien al tratamiento conservador, y el uso de cabestrillo se utiliza en el 90% de los casos. Por tanto, la intervención quirúrgica es excepcional y sólo se realizará en:
- Fracturas abiertas por afectación de la piel.
- Fracturas bilaterales por compromiso respiratorio.
- Politraumatizados, para acortar el tiempo de recuperación y que puedan usar cuanto antes las muletas.
- Fracturas desplazadas que afecten a la articulación (fracturas tipo II y III).
Lesiones musculares asociadas
En un fractura de clavícula habrá que tener en cuenta los músculos que se insertan en ella, con especial interés del ECOM (al rotar el cuello duele) pectoral mayor (dolor a la adducción del brazo) y deltoides (dolor al separar el brazo del tronco).
Lesiones nerviosas asociadas
A nivel neurodinámico, habrá que valorar el estado del plexo braquial, la sensibilidad y la movilidad del brazo, antebrazo, muñeca y dedos.
Lesiones vasculares asociadas
Bajo la clavícula se sitúa la arteria subclavia. Si ésta se lesiona la muerte es inminente.
Lesiones óseas y articulares asociadas
Según la situación de la clavícula, el traumatismo puede provocar también lesiones costales o de la escápula. Pueden aparecer también fallos en la consolidación quedando una deformidad estética por un callo óseo. Además, en fracturas desplazadas existirá riesgo de pseudoartrosis.
¿Qué es una fractura y una fisura y cuáles son sus fases de curación?
En este vídeo te hablaremos acerca de las fracturas y cuales son sus fases de curación.