Los músculos isquiotibiales se encuentran posterior al muslo, es sumamente importante para la correcta ejecución de la marcha, aunque todos hemos escuchado hablar sobre los ejercicios de estiramiento este importante grupo muscular, muy pocos son aquellos que saben realizarlo correctamente pudiendo llegar a generar daños sobre las fibras musculares a causa de ello.
Te expondremos los errores que más frecuentemente son llevados a cabo por la mayoría de las personas, de esta manera podrás evitarlos y obtener todos los beneficios que un buen estiramiento puede brindarle a tus isquiotibiales:
Hacer estiramientos cortos
Frecuentemente se ve un estiramiento rápido en donde se intenta tocar los dedos de los pies con los dedos de las manos de manera rápida y brusca, de esta manera solo ocasionarán molestias que pueden que sean momentáneas o no.
El estiramiento debe ser largo y prolongando, en donde se vaya relajando la fibra muscular de los isquiotibiales, al realizar con calma y de manera pausada se logrará obtener la relajación del grupo muscular y consecuentemente el alargamiento de las fibras musculares del mismo.
Hacer estiramientos muy intensos
No es recomendable ir más allá de la resistencia que te ofrece los isquiotibiales, al empujar esta resistencia se puede ocasionar que una lesión o esguince en los isquiotibiales, ya que los mismos no van a responder a la relajación si se les aplica una fuerza intensa y brusca. La manera adecuada es llevarlo progresivamente hacia su punto de estiramiento y esperar que el músculo se relaje alargando la longitud de su fibra progresivamente.
Hacer estiramientos con rebote
Al momento de llegar a la postura de elongación se debe mantener la misma por un tiempo prolongado lo que favorecerá la relajación del grupo muscular isquiotibial, si se sigue traccionando más y más de manera de rebote inducirá una respuesta de protección del músculo, evitando que el mismo se estire y ocasionado que se contraiga para protegerse de una posible lesión.
Para evitarlo se recomienda realizar el ejercicio de estiramiento gradualmente, manteniendo y sosteniendo el estiramiento por un tiempo, hasta no sentir tensión sino relajación de los isquiotibiales.
Bloquear la respiración
La respiración ayuda al momento de relajarnos, si se mantiene un bloqueo de respiración, el cuerpo responde con la contracción sostenida y una respuesta de tensión. Realizar el estiramiento de isquiotibiales en coordinación con la respiración mejorará la respuesta de los isquiotibiales, promoviendo su relajación y alargando su diámetro.
Hacer compensaciones por todos los lados
Estas compensaciones pueden ser la hipertensión de rodilla, rotaciones, retroversión pélvica y cifosis lumbar, por lo que un correcto estiramiento de isquiotibiales está directamente relacionado con la postura que se adopta, ya que las compensaciones impiden que los isquiotibiales sean efectivamente elongados, mientras que otros músculos son los que reciben la fuerza de tracción del estiramiento, dejando en parte de lado los músculos que realmente se quieren estirar.