El quiste de Baker suele ser una pregunta muy frecuente en consulta y que intranquiliza mucho a quien lo padece, cuando realmente no tiene significación patológica per se. Por eso vamos a aclarar un poquito los conceptos relacionados con el quiste de Baker y las dudas sobre qué es lo que realmente hay que prestar atención cuando tenemos un quiste de Baker.
¿Qué es y dónde se ubica el quiste de Baker?
El quiste de Baker es una protuberancia que se produce en la rodilla. La localización del quiste de Baker es en la zona de la rodilla, en la parte posterior. Hay otros quistes que pueden aparecer en la rodilla, secundarios a otras lesiones que no son el quiste de Baker, pero ahora veremos exactamente dónde se localiza generalmente la salida de este líquido.
El quiste aparece entre el músculo gemelo y el semimembranoso, es decir, en la parte más posterior y medial de la rodilla. A veces la persona te cuenta sobre su quiste de Baker, y te puede describir que siente un bulto o incluso una deformidad que, cuando flexiona al máximo la rodilla, no se puede realizar.
¿Es patológico el quiste de Baker?
El quiste de Baker por sí mismo no es patológico. Lo que hay que ver es por qué se hincha la rodilla. El quiste de Baker en sí es un fenómeno valvular en donde el líquido de la rodilla se sale en una especie de bolsa pero luego tiene dificultad para volver a entrar en la rodilla, con lo cual se va hinchando y se va haciendo más grande y por eso va produciendo a veces cada vez más molestias.
La causa más frecuente del quiste famoso quiste de Baker es la artrosis. Un 25 por ciento de las personas que tienen artrosis van a tener en más o menos medida episodios de derrame y por tanto tienen con mayor frecuencia este quiste de Baker. Más adelante en este vídeo te explicaremos los síntomas del quiste de Baker, el diagnóstico del quiste de Baker y el tratamiento del quiste de Baker.
