La cabeza está compuesta por el macizo óseo (hueso palatino, lagrimal, nasal, vómer, cigomático, mandíbula, cornetes y maxila superior) y por el cráneo (hueso temporal, parietal, occipital, esfenoides y etmoides), pero además de ellos, también tenemos a otras estructuras, como lo son las fosas nasales, las órbitas oculares y el hueso hioides. Y aunque todas esas partes mencionadas son importantes, en este texto nos dedicaremos a hablar sobre el hioides.
Esas 3 zonas que componen al hioides, son conocidas en anatomía como el cuerpo, siendo la pieza central, y sus dos extremos llamados astas, una es el asta mayor y la otra el asta menor. Tanto en las astas mayores como en las menores se insertan unos ligamentos, importantes para la estabilidad del hioides.
Este hueso presenta también como característica, que no se encuentra articulado a ningún otra estructura ósea, sino que está mantenido en la zona anterior del cuello, por ligamentos y músculos que no permiten que este se salga de su posición.
“Hueso de la cabeza, con forma de herradura que posee un cuerpo, astas mayores y astas menores”
¿Qué significa hioides?
Esta palabra proviene del griego, y es llamada así por su similitud con una herradura. La herradura, son las piezas, generalmente metálicas que se le colocan a los caballos en sus patas.
¿Dónde está el hioides?
Aunque forma parte del esqueleto de la cabeza, esta estructura se puede localizar en la zona cervical anterior (cuello), justo por arriba de la laringe (parte de la vía respiratoria ubicada después de la faringe), a nivel de la cuarta vértebra cervical.
¿Qué función tiene el hueso hioides?
Como ya se mencionó inicialmente, esta estructura solo se mantiene en su posición por la presencia de músculos y ligamentos. Esos músculos que se insertan en el cuerpo del hioides por su zona delantera son el músculo genihioideo, digástrico y los que vienen de la mandíbula, la lengua y del hueso temporal. Mientras que los que se insertan por su parte posterior, superior e inferior son los provenientes de la tiroides, del esternón y de la escápula.
“Recibe músculos provenientes de la mandíbula, lengua, hueso temporal, tiroides, esternón y la escápula, y además presta inserción al ligamento estilohioideo”
En cuanto, a los ligamentos, el principal es el ligamento estilohioideo que se inserta en las astas menores, y que tiene como recorrido pasar por la arteria carótida externa y el músculo hiogloso, que se origina en el hioides y se inserta en la lengua.
Además, permiten que los movimientos de la mandíbula se puedan dar correctamente, gracias a la acción de los músculos que se insertan en el hioides.
Lesiones en el hueso hioides
A este hueso la lesión que más lo afecta son las fracturas. Estas suelen estar acompañadas de síntomas como dificultad respiratoria, sensación de ahogo y dificultad para tragar.
“Las fracturas del hioides puede ocasionar interrupciones en la faringe”
El peligro de las fracturas en el hioides, es que puede ocasionar una interrupción en la faringe, lo cual no permite el paso de aire llegando a ocasionar que la persona deje de respirar.