El sistema muscular necesita de componentes como fibras, miocitos, proteínas como la actina, la miosina y la tropomiosina para poder realizar su función principal que es contraerse, lograr transmitir una fuerza y finalizar con un movimiento de alguna parte del cuerpo.
En pocas palabras la contracción muscular tipo isotónica es un deslizamiento de las fibras musculares, en las que se genera un cambio importante en la longitud del músculo como consecuencia de una fuerza constante.
"Tanto la contracción excéntrica como la concéntrica son consideradas un tipo de contracción isotónica"
¿Cómo se produce la contracción isotónica?
Todas las contracciones musculares se producen de una manera similar, la diferencia es la intensidad de la fuerza, la resistencia ejercida por el músculo y el tipo de respuesta que se genera en las fibras musculares.
El proceso de la contracción se da de la siguiente manera:
- Comienza con el deslizamiento de los filamentos, el cual ocurre gracias a la presencia de ATP.
- La cabeza de la proteína miosina se une con la actina, con lo que produce un desplazamiento.
- Una vez que ya se ha generado ese movimiento, la cabeza de la miosina se libera y se produce de nuevo la tensión con una nueva actina.
Este es un proceso continúo que genera tensión múltiples veces para lograr el resultado final que puede ser tanto un movimiento de un músculo liso como de uno tipo estriado.
"Las contracciones isotónicas se producen mediante la tensión y liberación continúa de la actina con la miosina"
¿En qué movimientos se produce la contracción isotónica?
Las contracciones excéntricas se producen en movimientos donde se busca alejar dos superficies corporales, como ocurre cuando extendemos el codo y cuando flexionamos la rodilla. Este tipo de contracción genera una tensión muscular que tiene como resultado un aumento de la longitud de las fibras musculares.
En cambio la contracción concéntrica se produce en los movimientos contrarios, por ejemplo cuando flexionamos el codo y cuando se extiende la rodilla. Y en este caso, la longitud del músculo también varía, pero en sentido contrario a la excéntrica, es decir se acortan las fibras musculares.
Para que lo entiendas un poco más, un ejemplo de las contracciones concéntricas son las que realizamos cuando nos vamos a peinar o a tocar la cara; y en cambio las contracciones excéntricas son las que se realizan en sentido contrario y a favor de la gravedad.
¿Cuál es la importancia de la contracción isotónica?
Las contracciones musculares, en este caso las isotónicas son necesarias para todos los movimientos que realizamos, debido a que gracias a ellas es que podemos mover los brazos, piernas, manos, pies y también como ocurre en el corazón, pero en este caso es llamada como contracción isobárica.