La miastenia gravis se considera un trastorno de origen autoinmune, en que la comunicación entre los nervios y los músculos se encontrara interrumpida, caracterizándose por la aparición de debilidad y fatiga muscular rápida o fluctuante, afectando los músculos inervados por los pares craneales.
La mayoría comienzan con alteración de los músculos oculares, como la diplopía o la ptosis palpebral. Estos problemas oculares se dan con frecuencia en más del 15% de la población que sufre de miastenia gravis. Esta debilidad también puede implicar a los músculos bulbares que afectarán en la masticación, salivación o de la articulación temporomandibular.
La fatiga muscular presente en estos pacientes mejora con el reposo y el descanso y aumentará con la actividad física o al finalizar el día, cuando se encuentran más cansados.
Fisiología de la miastenia gravis (6)
Datos epidemiológicos importantes sobre la miastenia gravis
La miastenia gravis afecta a personas de todas las edades, con mayor influencia en mujeres entre los 20 y 40 años y hombres entre los 60 y 70 años de edad, en los neonatos afecta un 15% de los niños con madres con este trastorno.
Algunas investigaciones han asociado a la miastenia gravis con diversas enfermedades autoinmunes, como la neuromielitis óptica, enfermedades de la tiroides, el lupus eritematoso sistémico y también la artritis reumatoide.
Prevalencia de la miastenia gravis (7)
Síntomas de la miastenia gravis
Los principales síntomas que presentan los pacientes con este trastorno en la debilidad y fatiga muscular.
- Estos pacientes presentan inconvenientes al momento de respirar, por la debilidad constante de los músculos de la pared abdominal.
- Puede tener sensaciones de ahogamiento, de salivación y de arcadas, ya que se le imposibilita tragar y masticar de la manera adecuada.
- Se les dificulta subir las escaleras, alzar objetos o realizar algún esfuerzo como al momento de incorporarse de donde están sentados.
- Presentan dificultades para articular palabra.
- Presentan ptosis palpebral de uno o ambos párpados.
- Como los músculos faciales se encuentran debilitados es probable que exista una parálisis facial.
- Tienen fatiga muscular.
- Existencia de diplopía, de origen horizontal o vertical.
- Se le es imposible mantener la mirada fija.
Ptosis palpebral en la miastenia gravis (8)
Evolución de la miastenia gravis
Los síntomas al comienzo de este trastorno suelen ser pasajeros, pudiendo el paciente pasar de horas hasta semanas sin síntoma alguno, a pesar de esto, al pasar el tiempo, las manifestaciones clínicas suelen agravarse y se vuelve más persistentes, el 80% de estos paciente logran el límite máximo de este trastorno luego de 3 años.
Por esto, se dividen en 3 etapas:
- La primera etapa consta de los primeros 3 a 5 años de la enfermedad, donde la fase activa se presenta con fluctuaciones y empeoran de manera progresiva los síntomas, más del 50% de los pacientes con miastenia gravis en esta etapa fallecen.
- En la segunda etapa es de estabilización, donde el paciente mantiene los síntomas, sin agravarse.
- En algunos casos, los pacientes avanzan hasta la tercera etapa, pudiendo remitir completamente de la enfermedad, libre de síntomas, teniendo la necesidad o no de mantener el tratamiento farmacológico.
También se puede dividir dependiendo de los músculos que se encuentran afectados.
- La miastenia ocular; está afecta principalmente los músculos oculares, presentado problemas como diplopía o ptosis palpebral.
- La miastenia bulbar; afectando principalmente los músculos de la garganta o rostro, provocando diferentes vías para alimentarse.
- La miastenia generalizada; como su nombre indica, afecta a todos los músculos del cuerpo, principalmente a la musculatura de la cintura escapular, cintura pélvica y a nivel de cervical, presentando dificultad para levantar objetos o permanecer en bipedestación.
Test especiales para evaluación de la miastenia gravis antes de realizar un programa de ejercicio
Se describirán ciertos test y pruebas para evaluar el estado del paciente al inicio y al finalizar el programa de ejercicio.
- La caminata de 6 minutos.
- Dinamometría manual, para medir la fuerza máxima al momento y también la fuerza de resistencia sosteniendo por 10 segundos con cada mano.
- Pruebas de flexibilidad de tronco, miembros superiores e inferiores.
¿Por qué usar el ejercicio físico en pacientes con miastenia gravis?
Según estudios científicos la implementación de un programa de ejercicios de baja intensidad con una corta duración, aporta diversos beneficios como la mejoría de la capacidad funcional y también tiene una gran influencia en la calidad de vida de estos pacientes.
La actividad aeróbica de bajo impacto funciona para disminuir la fatiga, actividades como la natación, la carrera o la caminata, pedaleo en bicicleta suave, presentando buenos resultados.
Un estudio realizó un plan de tratamiento con hiperpnea normocápnica en 5 sesiones de 30 minutos cada una, por un periodo de 4 o 6 semanas, logrando una mejoría en la función respiratoria, en la percepción del bienestar físico, beneficiando en la función pulmonar y en la calidad de vida de los pacientes.
Otras maniobras de fisioterapia respiratoria para ayudar a la expansibilidad y funcionamiento de los músculos inspiratorios, como técnicas de expansión pulmonar, aprender a respirar a través del diafragma, la respiración con los labios fruncidos de esta manera reclutar mayor cantidad de fibras musculares de la musculatura abdominal y respiratoria, mejorando así la capacidad pulmonar y la calidad de vida de los pacientes con miastenia gravis.
En la siguiente tabla se muestra un programa especializado para una paciente con miastenia gravis.
Tabla extraída de: Beneficios de un programa de ejercicio multicomponente de baja intensidad y corta duración en la miastenia gravis. A propósito de un caso.
Por esto y muchas razones más, se recomienda realizar actividad física de baja intensidad y de corta duración, ya que trae beneficios en la mejora de la salud, en la calidad de vida, se evita el sedentarismo porque esto produce atrofia muscular y favorece a la aparición de la osteoporosis, aumenta los niveles de autoestima y la interacción con su medio ambiente.
Referencias
- Fernández, B. y Beas, J. Beneficios de un programa de ejercicio multicomponente de baja intensidad y corta duración en la miastenia gravis. A propósito de un caso. Revista Andaluza de Medicina del Deporte. 7(4). 178-181. 2014.
- Herrera, O. y col. Miastenia Gravis: diagnóstico y tratamiento. Revista Archivo Médico de Camagüey. 13(5). 2009.
- Castro, S. y col. Actualización en Miastenia Gravis. Revista Neuropsiquiatria. 80 (4). 247-260. 2017.
- Miastenia Grave. MedlinePlus.
- Pinheiro, P. Miastenia Gravis- causas, síntomas y tratamiento. Enfermedad autoinmune, neurología. 2018.
- Imagen extraída de Diplomadomédico.com
- Imagen extraída de Enfermedadesrarascillo5.blogspot.com
- Imagen extraída de Miasteniagravis.net