La columna vertebral es la zona del cuerpo que se encarga de proteger a la médula espinal, por lo tanto constituye una parte delicada del cuerpo. Esta área anatómicamente se encuentra formada por 33 vértebras, las cuales a su vez tienen estructuras más pequeñas, todas necesarias para el ser humano. Ahora bien, existen distintas patologías que pueden afectarla, sin embargo una de las más comunes es la Protrusión discal, que puede aparecer en cualquier zona del raquis.
Por ejemplo, en el caso de la Protrusión discal cervical, encontramos que esta lesión se produce por debilidad del anillo fibroso y con consiguiente deslizamiento del núcleo pulposo fuera de su cavidad, lo cual ocasiona síntomas variados como el dolor, hormigueo, movimiento restringido y debilidad muscular. Entonces, debido a lo limitante que puede tonarse la patología para la persona que lo padece, en el siguiente artículo te mostramos un conjunto de técnicas que pueden ayudar a aminorar los signos clínicos, sobre todo la tensión muscular y el dolor:
¿Cómo los masajes ayudan en la Protrusión discal cervical?
La Protrusión discal en la zona cervical puede ser ocasionado por distintas disfunciones corporales, sin embargo muchas de ellas tienen en común la falta de ejercicio, la debilidad muscular, el estrés y las alteraciones posturales, las cuales ocasionan tensión muscular como respuesta de protección del mismo cuerpo. Es por eso que entre las técnicas de tratamiento de fisioterapia se incluyen las masajes.
"La Protrusión discal es una lesión que puede aparecer en cualquier región de la espalda, es decir tanto en cervical como lumbar y dorsal, la mayoría del tiempo con síntomas similares"
Es importante mencionar que la hernia de disco cervical no es lo mismo que la Protrusión.
Entonces, ¿Cómo me pueden ayudar los masajes si tengo una lesión cervical?
Los masajes son técnicas manuales que provienen del pasado, ya que han demostrado ser efectivos para:
- Aliviar el dolor.
- Aumentar la circulación local y con esto el oxígeno en los tejidos.
- Incentivar los procesos de reparación tisular.
- Relajar la musculatura y la fascia.
- Disminuir la tensión y el estrés, los cuales pueden retrasar la recuperación de la columna.
Ya sabemos que los masajes pueden generar múltiples beneficios, por lo que a continuación te presentamos una serie de vídeos en los cuales se describen algunas técnicas de tratamiento de fisioterapia que puedes realizar por ti mismo en casa, para aliviar los síntomas de la lesión en el cuello:
Automasajes cuello
El cuello es una región compleja debido a la gran cantidad de músculos que se sitúan allí, es por eso que aprender cuales zonas se pueden tratar con automasajes pueden aportar múltiples efectos positivos, para todas aquellas personas que tienen alguna disfunción en las estructuras cervicales.
Automasajes de trapecio
El trapecio es un músculo amplio que se localiza no solo en el área cervical sino también en la dorsal, por lo que aplicar técnicas de amasamiento y fricción por toda su extensión, constituye una buena manera de aliviar el dolor, la tensión y disminuir el estrés que tiende a acumularse en el cuello, por ser parte del lugar que sostiene y mueve a la cabeza.
Movilizaciones con una toalla para cervical
Además de los automasajes para aliviar la tensión, el cuello también requiere de movimientos para evitar la rigidez que puede acompañar a la Protrusión discal, es por eso que en el siguiente vídeo podrás visualizar técnicas con toallas para movilizar la región cervical.
"La salud de la columna vertebral puede resultar afectada por múltiples lesiones, por lo que realizar ejercicios es la mejor manera que tenemos para prevenir los daños vertebrales"
Aparte de las intervenciones mencionadas, es necesario mencionar que en las sesiones de fisioterapia también se utilizan las siguientes técnicas:
- Ejercicios de fortalecimiento, no solo del área del cuello sino también de lumbar y dorsal.
- Estiramientos progresivos de toda la musculatura de la espalda.
- Colocación de compresas calientes para aliviar la tensión de la musculatura
- Ejercicios para trabajar la flexibilidad y aumentarla.
- Movilizaciones de todo el miembro superior, ya que los problemas de disco pueden comprimir nervios y generar parestesias.
- Actividades para disminuir el estrés y cualquier problema emocional, ya que estos pueden empeorar la recuperación del paciente.
- Reeducación postural, ya que los problemas posturales pueden generar mayores disfunciones musculoesqueléticas.
- Incluir pausas activas durante las jornadas laborales.
