Los principios terapéuticos en que se basa la equinoterapia son la transmisión de calor corporal, la transmisión de impulsos rítmicos y la transmisión de un patrón de locomoción tridimensional equivalente al patrón fisiológico de la marcha humana.
Beneficios fisiológicos y psicosociales de la equinoterapia
Los beneficios fisiológicos se basan en la estimulación de las reacciones de equilibrio y enderezamiento, estabilización del tronco y la cabeza, la capacidad de atención, el equilibrio y la coordinación psicomotriz. También aumenta la capacidad de adaptación, la memoria y enriquece el vocabulario.
Los beneficios psicosociales son ayudar en los problemas de conducta (agresividad, aislamiento...) Disminuye la ansiedad y los temores personales, fomenta la autoconfianza y la concentración, mejora la autoestima y el control de las emociones, incrementa la interacción social, capacidad de adaptación, la relación con personas que no pertenecen al entorno familiar o escolar y desarrolla el respeto hacia los animales.