Tengo 27 años, he tenido una remoción de osteocondroma cuatro años atrás, en esta cirugía lamentablemente perdí dos ligamentos, por esta razón el médico que me operó me dijo que porque era joven mi pie aprendería a vivir sin ligamentos, pero a los dos años me fracture la tibia y el peroné en un paso que di mal, fractura leve sin desplazamiento, me recupere sin complicaciones.
Resulta qué me vuelto a fracturar el peroné hace unas semanas, nuevamente una fractura leve de la que me estoy recuperando, estoy usando una bota walker, pero no he podido ver información de estas botas en el canal.
Mi Tobillo es evidentemente inestable, no sé si pueda fortalecer estos tobillos con fisioterapia par evitar las fracturas y fortalecer el tobillo, o si es más recomendable buscar una cirugía para reconstruir ligamentos, no quiero estar fractura cada vez que se me tuerce el pie, pero tampoco quiero operar mi tobillo de no ser necesario, desde la fractura, el tobillo funciona bien, puedo llevar una vida completamente normal, uso tacones, bailo, hago ejercicio sin ningún dolor, esta vez me fracture usando unas grandes plataformas en un terreno inestable, el
medico no me recomienda usar tobilleras, o usarlas solo para actividades en lugares inestables, por que mi pie se va a acostumbrar a ellas y no va a responder cuando no las tengo, confío mucho en su canal y me gustaría hacer una consulta con ustedes para exponer el caso de ser posible y escuchar algunas recomendaciones
Un simple esguince o torcedura de tobillo puede conllevar a una fractura del peroné, ya que la zona distal de esta estructura está enlazada a los huesos del pie mediante unos fuertes y resistentes ligamentos que, al sufrir una lesión como un esguince, estos tracciona tan fuertemente sus inserciones óseas que rompen al hueso en algún punto. Esta situación puede darse como consecuencia de actividades deportivas como el fútbol o baloncesto, así como también en la realización de actividades recreativas como la danza. Sin embargo, las situaciones traumáticas como un accidente automovilístico o caídas pueden conducir a esta lesión ósea.
Para fomentar el proceso de curación natural del hueso, son necesarias intervenciones especificas acorde a los tiempos de curación que se están desarrollando. La interferencia con el tiempo de curación natural, como no seguir el estado de carga de peso según la fase de consolidación ósea, puede desplazar el hematoma y el hueso no puede curarse. Así como también, demasiado movimiento en el sitio de la fractura realizado de manera temprana, puede afectar el proceso de curación y evitar que se forme un callo rígido y duro, lo que da como resultado que el sitio fracturado se vuelva inestable (pseudoartrosis).
Inicialmente el fisioterapeuta busca aliviar el dolor y la inflamación presentes mediante el uso de crioterapia, termoterapia y drenaje linfático manual, en caso de que el tratamiento médico fuese conservador, también se usan ultrasonido terapéutico y magnetoterapia para incentivar la curación ósea. En esta fase se evita la descarga de peso, así como también se evitan movilizaciones tanto activas como pasivas del tobillo, sin embargo, se incentiva el movimiento y la fuerza muscular de las articulaciones metatarsofalángicas y de la rodilla. Una vez cumplidas las 4 semanas, se dan inicio a movilizaciones en el tobillo, así como también el fisioterapeuta da inicio a un entrenamiento progresivo, enfocado en ganar fuerza muscular de los cuádriceps, flexores dorsales y plantares del tobillo.
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