Hernias discales.

Cuando nos dicen que padecemos una hernia discal es un momento aterrador, se nos viene el mundo encima y pensamos poco menos que vamos a estar inválidos, todo esto es debido al desconocimiento y a la actitud médica al respecto, sin embargo debemos tener en cuenta que no todas la hernias discales son iguales, ni todas las personas somos iguales, ni el sufrir una hernia discal debe ser algo incapacitante y definitivo. Una de las mejores cosas que podemos hacer para superar este miedo e impotencia inicial, es entender los mecanismos de acción de una hernia discal y de qué forma podemos actuar activamente en la resolución del problema.

¿Cómo se produce una hernia discal o hernia de disco?

Una hernia discal ocurre cuando el contenido del disco (un fluido gelatinoso) que está entre los cuerpos vertebrales sale fuera del anillo fibroso que lo contiene, este líquido, puede salir en diferentes direcciones dependiendo de en qué zona estaba más dañado el anillo fibroso, dependiendo de la zona hacia la que salga el contenido y la cantidad de contenido que salga las consecuencias serán diferentes.

Lo primero que ocurre cuando se produce una hernia es un proceso inflamatorio que provocará dolor y compresión y que si se trata adecuadamente se resolverá sin problema. Por otro lado, el propio contenido del disco y el proceso inflamatorio consiguiente puede presionar diferentes estructuras como la raíz de un nervio o el canal medular. Si el sistema nervioso sufre esta compresión puede dar síntomas como dolor, alteración de la sensibilidad o pérdida de fuerza o función de los músculos inervados por la zona afectada.

Hernia discal o de disco cervical. Qué es, causas, síntomas y tratamiento

En este vídeo os explico qué es una hernia discal a nivel cervical y cuáles son sus causas, la sintomatología que presenta y el tratamiento que se propone en fisioterapia:

Un aspecto muy importante a tener en cuenta es que no siempre que tengamos una hernia tenemos porqué sufrir sus síntomas, es un gran error pensar que si tenemos dolor cervical o lumbar y una hernia a ese nivel, el dolor o los síntomas siempre están relacionados, en muchas ocasiones puede existir una relación causa-efecto pero no siempre tiene que ocurrir así. Es necesario no descartar otras causas de la patología cuando vemos que existe una hernia, que los árboles no te impidan ver el bosque.

¿Qué podemos hacer para solucionar las consecuencias de una hernia discal?

Un aspecto a tener presente es que a no ser por una fuerte causa traumática, si has sufrido una hernia es porque ya el anillo fibroso estaba en mal estado debido a un mal funcionamiento de tus movimientos y unos malos hábitos de vida. Por lo tanto, para poder solucionar el problema deberemos también cambiar esto, es decir, será muy importante atender en un momento inicial las consecuencias de la hernia: el dolor y las alteraciones funcionales y de la sensibilidad; pero una vez esto mejore, no habremos solucionado el problema si no cambiamos la postura del paciente, su forma de vivir y de alimentarse.

Para eso es imprescindible implicar al paciente y hacerle parte activa de la solución del problema, por lo tanto debemos atender a las principales causas de la hernia que son: la inestabilidad de un segmento lumbar (los más comunes L5-S1 y L4-L5) que en ocasiones pueden estar relacionados con una hipomovilidad a nivel dorsal, la rectificación de la lordosis lumbar que propicia un mal reparto de las cargas a nivel de los discos vertebrales y la pérdida de la capacidad contráctil de los músculos multífidus y estabilizadores de los segmentos lumbares –esto es debido a estar continuamente sentados y a la vida sedentaria, a situaciones de estrés crónico que mantiene a algunos músculos importantes en un continuo estado de contracción, a una disminución del sistema ginecológico y de recuperación del organismo.

Es imprescindible tener en cuenta los aspectos alimenticios y viscerales íntimamente relacionados con el distrés o estrés negativo, en definitiva debemos mirar al conjunto de la persona para realmente solucionar el problema.

Hernia discal o de disco lumbar. Qué es, causas, síntomas y tratamiento

Te explico en este vídeo qué es la hernia de disco lumbar y cuáles son sus causas y síntomas, además de proponerte un tratamiento en fisioterapia adecuado a las causas que hayamos determinado:

Tanto la fisioterapia como la terapia manual disponen de diversas estrategias terapéuticas para tratar una hernia discal desde su fase más aguda donde se realizarán técnicas de bombeo articular y se enseñará al paciente posiciones antiálgicas que alivien el dolor hasta técnicas de estabilización lumbar, movilización de zonas hipomóviles y corrección postural en fases más avanzadas del proceso.

Sin olvidarnos de las técnicas analgésicas como el masaje o la inhibición por presión para relajar los músculos con un espasmo asociado a la hernia. Otra gran herramienta de la terapia manual es la movilización del sistema nervioso o neurodinámica que puede colaborar a un mejor funcionamiento del nervio.

¿Cómo se produce una hernia discal por una disfunción o alteración visceral?

En este vídeo os explicamos la relación entre una hernia discal y la alteración de un órgano o una víscera:

¿La hernia es para toda la vida?

Al igual que el matrimonio, el problema de las hernias ha ido cambiando con el paso del tiempo. Si antes se pensaba que era para toda la vida, hoy en día las cosas ya no son así (no quiero decir que el matrimonio sea un problema). Se sabe que lo más importante de la columna lumbar es la función correcta, es decir, si ya no tienes síntomas has corregido tu postura y tus hábitos.

Lo mejor es que te olvides de la palabra hernia ya que muchas personas han sufrido hernias, no han tenido síntomas nunca y lo han descubierto por una prueba diagnóstica por imagen para otra patología, es decir, esta persona no tenía una hernia discal hasta que se lo dijeron. Esto quiere decir que ¿cuándo no tenga síntomas puedo ya olvidarme de mi cuerpo? De ninguna manera, pero te voy a dar una noticia, toda la vida deberíamos ocuparnos de nuestro cuerpo y mente ya tengas una hernia o no, cuidar lo que comes, cómo te mueves y cómo vives es imprescindible siempre.

Si tienes una hernia no pienses que está todo perdido, ya puedas solucionarlo de forma conservadora o te hayas operado tienes soluciones para mejorar tu estado, recuerda que puedes encontrar más información, consejos y herramientas para cuidarte en nuestro portal fisioterapia-online.com